Iglesia de San Esteban
En pleno corazón de la ciudad de Murcia, junto al Palacio de San Esteban, se alza uno de los templos más emblemáticos del patrimonio religioso regional: la Iglesia de San Esteban. Este espacio sagrado, construido en el siglo XVI como parte de uno de los primeros colegios de la Compañía de Jesús en España, representa un testimonio excepcional de la arquitectura renacentista murciana y constituye un referente imprescindible para comprender la historia religiosa, educativa y cultural de la ciudad.

El templo, que hoy forma parte del conjunto monumental declarado Monumento Nacional en 1931, conserva un valor artístico y patrimonial de primer orden. Aunque en la actualidad la iglesia se encuentra desacralizada y reconvertida en sala de exposiciones, su fachada, su interior y las obras que alberga siguen fascinando a visitantes, devotos y estudiosos del arte. Además, mantiene una estrecha vinculación con la Semana Santa de Murcia, al ser el punto de partida procesional de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia cada Viernes Santo.
Contenido
- 1 Orígenes y contexto histórico
- 2 Un faro educativo y cultural
- 3 Información práctica
- 4 Arquitectura renacentista
- 5 Tesoros artísticos
- 6 Celebraciones y actos
- 7 Curiosidades históricas
- 8 Preguntas frecuentes
- 9 Enlaces de interés
- 10 Templos
- 10.0.1 Iglesia Arciprestal de Nuestra Señora del Carmen
- 10.0.2 Iglesia de Jesús
- 10.0.3 Iglesia de San Antolín Mártir
- 10.0.4 Iglesia de San Bartolomé – Santa María
- 10.0.5 Iglesia de San Esteban
- 10.0.6 Iglesia de San Francisco de Asís
- 10.0.7 Iglesia de San Juan Bautista
- 10.0.8 Iglesia de San Juan de Dios
- 10.0.9 Iglesia de San Lorenzo
- 10.0.10 Iglesia de San Nicolás de Bari
- 10.0.11 Iglesia de San Pedro Apóstol
- 10.0.12 Iglesia de Santa Catalina
- 10.0.13 Iglesia de Santa Eulalia
Orígenes y contexto histórico
La historia de la Iglesia de San Esteban comienza en el año 1555, cuando el obispo Esteban de Almeyda, prelado de la Diócesis de Cartagena entre 1546 y 1563, impulsó con determinación la fundación en Murcia de uno de los primeros colegios de la Compañía de Jesús en territorio español. Este dignatario portugués, vinculado a la Casa Real Portuguesa, negoció personalmente con San Ignacio de Loyola, fundador de los jesuitas, para establecer en la capital murciana un centro de formación religiosa, humanística y científica que transformara la sociedad de la época.
Las obras del Colegio de San Esteban —nombre otorgado en honor al obispo promotor— comenzaron en 1555 y se desarrollaron en las proximidades de la parroquia de San Miguel, en pleno arrabal de la Arrixaca, un antiguo barrio de origen islámico situado extramuros de la Murcia medieval. El colegio se finalizó en 1557, mientras que la construcción de la iglesia concluyó en 1569, configurando así un conjunto arquitectónico de gran relevancia que pronto se convertiría en el epicentro educativo y espiritual de la ciudad.
El proyecto arquitectónico fue encargado a Jerónimo Quijano y Juan Inglés, maestros de obras que por aquellos años trabajaban simultáneamente en la torre de la Catedral de Murcia y en la Capilla de Junterón. Esta conexión con los grandes proyectos catedralicios de la época dotó al templo de una calidad constructiva excepcional y de una coherencia estilística con el renacimiento murciano más destacado.
Un faro educativo y cultural
El Colegio de la Compañía, como también se conocía popularmente al conjunto, se convirtió rápidamente en un referente intelectual de primer orden. Durante más de dos siglos, el centro impartió enseñanzas de gramática, filosofía, teología, escolástica moral y escritura, formando a buena parte de los hombres de letras del Reino de Murcia. Entre sus ilustres alumnos figuran nombres tan destacados como el licenciado Francisco Cascales, erudito humanista, y el propio Francisco Salzillo, el genio de la imaginería barroca murciana.
El obispo Almeyda, fundador del colegio, dejó para la biblioteca toda su colección particular de libros tras su fallecimiento en 1563, una donación que consolidó la institución como fuente del saber regional. Rectores de gran preparación, como Juan Bautista de Barma y Pedro Doménech, dirigieron el centro y perpetuaron su prestigio académico hasta la expulsión de los jesuitas de España en 1767, ordenada por Carlos III.
Información práctica
Ubicación y acceso
La Iglesia de San Esteban se encuentra en la calle Acisclo Díaz, en el centro histórico de la ciudad de Murcia, junto al Palacio de San Esteban, sede de la Presidencia de la Región de Murcia. Su ubicación privilegiada, a escasos metros de otros monumentos emblemáticos como la Iglesia de San Miguel o el Jardín de San Esteban, facilita su inclusión en cualquier recorrido cultural por la capital murciana.
| Concepto | Información |
|---|---|
| Dirección | Calle Acisclo Díaz, s/n, 30002 Murcia |
| Estado actual | Iglesia desacralizada, reconvertida en sala de exposiciones y actos |
| Acceso | Visitas durante exposiciones temporales organizadas por el Gobierno Regional |
| Uso procesional | Sede procesional de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia (Viernes Santo) |
| Protección patrimonial | Monumento Nacional desde 1931 |
Nota importante: Actualmente la iglesia no se utiliza para el culto religioso habitual, por lo que no dispone de horarios de misas regulares. Su apertura al público depende de la programación de eventos culturales y exposiciones temporales organizadas por instituciones públicas. Se recomienda consultar la agenda cultural del Palacio de San Esteban o del Ayuntamiento de Murcia para conocer las fechas de apertura.
Arquitectura renacentista
La Iglesia de San Esteban es la única construcción de arquitectura completamente renacentista en el municipio de Murcia, lo que aumenta extraordinariamente su valor patrimonial. Su diseño exterior e interior responde a los cánones estéticos del Renacimiento italiano adaptados al contexto español del siglo XVI.
La portada lateral del templo, de autor desconocido, constituye uno de los elementos más sobresalientes del conjunto. Responde al esquema clásico del «arco de triunfo», flanqueado por dos pares de columnas entre las que se sitúan las esculturas de San Lucas y Santa Catalina. A finales del siglo XVII se completó la fachada con las imágenes de San Esteban (en el centro), San Ignacio de Loyola y San Francisco Javier, dos de los santos más venerados de la Compañía de Jesús. Esta composición arquitectónica guarda ciertos vínculos estilísticos con la portada de la antesacristía de la Catedral de Murcia, lo que subraya la conexión entre ambos proyectos constructivos.
El interior del templo presenta una nave única de esbeltas proporciones y gran monumentalidad. Las pilastras de orden gigante articulan el espacio, mientras que las capillas laterales se distribuyen a lo largo de los muros sin comunicación entre ellas. El coro se sitúa a los pies de la iglesia, siguiendo el esquema tradicional de los templos jesuitas.
Un elemento distintivo del edificio es su cubierta, formada por bóvedas de crucería con trazas estrelladas que evocan el gótico tardío, un recurso arcaizante poco habitual en las construcciones renacentistas pero que dota al espacio de una solemnidad y verticalidad excepcionales. El presbiterio, profundo y rematado en ábside, alberga la Capilla Mayor, el núcleo artístico más relevante del templo.
Tesoros artísticos
El interior de la Iglesia de San Esteban atesora piezas de extraordinario valor artístico que convierten al templo en un auténtico museo del Renacimiento murciano.
El retablo de la Capilla Mayor es, sin lugar a dudas, una de las obras renacentistas más importantes de la ciudad y de toda la Región de Murcia. Se trata de una pieza excepcional no solo por su diseño arquitectónico, sino por ser uno de los pocos retablos de este período ejecutados parcialmente en piedra, en lugar de la madera policromada habitual. La combinación de piedra tallada y policromía le confiere una riqueza visual única. Su monumentalidad y elegancia decorativa lo sitúan a la altura de las grandes obras del Renacimiento español.
Otro de los grandes tesoros del templo es el sepulcro del obispo Esteban de Almeyda, obra maestra del escultor italiano Bartolomé de Lugano, ejecutada en 1572. Esta pieza funeraria, realizada en mármol de Carrara, constituye una de las cumbres de la escultura funeraria renacentista en España. El sepulcro, que originalmente se situó en el interior de la iglesia, fue retirado cuando el templo se habilitó como sala de exposiciones, aunque recientemente ha sido restaurado y colocado en la sacristía del oratorio, donde puede ser admirado por el público.
Las estatuillas de los Cuatro Padres de la Iglesia que decoraban las esquinas del túmulo funerario —posiblemente obra de Juan de Lugano, pariente del anterior— fueron redescubiertas durante las obras de restauración del templo en la primera década del siglo XXI y representan un hallazgo de incalculable valor para el patrimonio murciano.
Las capillas laterales de la iglesia, aunque actualmente ocultas al uso expositivo del espacio, albergan retablos de la primera etapa del barroco murciano (siglo XVIII), caracterizados por composiciones equilibradas y una decoración abigarrada que impacta visualmente. Estas obras, prolongación de los retablos del siglo XVII, esperan una restauración integral que permita su correcta contemplación.
Celebraciones y actos
Aunque la Iglesia de San Esteban no acoge culto religioso regular desde su desacralización, el templo mantiene una vinculación emocional y procesional con la Semana Santa de Murcia. Cada Viernes Santo, a las 18:15 horas, la iglesia se convierte en el punto de partida de la procesión de la Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia, popularmente conocida como la de «Los Pavos» por el color granate de las túnicas de sus nazarenos.
Esta cofradía, fundada en 1949 por un grupo de funcionarios de la antigua Casa de Misericordia (institución que ocupó el edificio del colegio jesuita tras la expulsión de la Compañía en 1767), tiene como imagen titular el Santísimo Cristo de la Misericordia, un crucificado del siglo XVI obra del jesuita Domingo Beltrán (1581). Esta talla, custodiada originalmente en el templo de San Esteban, es una de las esculturas más antiguas y valiosas de la Semana Santa murciana.
La procesión de la Misericordia desfila con cuatro pasos: el Jesús Nazareno del Bailío (Roque López, 1797), el titular, el Descendimiento (José Hernández Navarro, 2001) y Nuestra Señora Madre de Misericordia (José Sánchez Lozano, 1927). Aunque la sede canónica de la cofradía se encuentra en la Iglesia de San Miguel, las reducidas dimensiones de su puerta hacen que la procesión salga desde San Esteban, un vínculo histórico que perpetúa la memoria jesuita del templo.
En enero de 2017, durante las obras de restauración de la iglesia, se procedió a la sepultura de los restos de 75 jesuitas que fueron hallados bajo el suelo del templo. Sus restos fueron trasladados y sepultados en una nueva tumba en la sacristía, en un acto de justicia y reconocimiento a la labor educativa y social que realizaron durante siglos.
Curiosidades históricas
La Iglesia de San Esteban y su colegio jesuita están rodeados de episodios históricos fascinantes que enriquecen su ya de por sí extraordinaria trayectoria.
Un canto popular en tiempos de peste: Durante la epidemia de peste que asoló Murcia en 1558, apenas tres años después de la fundación del colegio, surgió un canto popular que decía: «Los médicos son huidos, cerradas son las boticas, no hayan temor que nos quedan Jesús y los Jesuitas». Esta copla refleja el profundo arraigo que la comunidad jesuita alcanzó en la ciudad gracias a su labor asistencial en momentos de crisis.
El museo del traje folclórico: Entre los años 30 y 70 del siglo XX, el edificio del antiguo colegio albergó el Museo del Traje Folclórico, considerado en su momento una de las mejores colecciones españolas en su categoría. A pesar de este valioso contenido, el edificio estuvo a punto de ser demolido en 1972 debido a su estado ruinoso.
El yacimiento de la Arrixaca: En 2009, durante las obras preparatorias para la construcción de un aparcamiento subterráneo en el Jardín de San Esteban, aparecieron importantes restos de un barrio árabe de los siglos XII y XIII correspondientes al antiguo arrabal de la Arrixaca. El hallazgo, calificado por arqueólogos como José María Luzón Nogué como de extraordinario valor histórico, motivó fuertes protestas ciudadanas y la declaración BIC del yacimiento en 2010, evitando así la construcción del parking.
Renovación del suelo: Durante las obras de restauración llevadas a cabo entre 2009 y 2019 por el arquitecto José Félix Santiuste de Pablos, se renovó completamente el pavimento del templo, instalándose un suelo de madera de Douglas de tablones de gran longitud (7,5 metros) que subraya la grandiosidad del espacio y recupera la calidez del entorno original.
Preguntas frecuentes
¿Se puede visitar la Iglesia de San Esteban en Murcia?
Actualmente, la iglesia está desacralizada y funciona como sala de exposiciones y actos del Gobierno Regional. Las visitas dependen de la programación de eventos culturales y exposiciones temporales. Se recomienda consultar la agenda del Palacio de San Esteban para conocer las fechas de apertura.
¿Cuándo se construyó la Iglesia de San Esteban?
Las obras de la iglesia comenzaron en 1555 junto al Colegio de San Esteban y concluyeron en 1569. Es una construcción renacentista del siglo XVI promovida por el obispo Esteban de Almeyda como parte de uno de los primeros colegios jesuitas de España.
¿Por qué la iglesia lleva el nombre de San Esteban?
El templo recibe su nombre en honor a Esteban de Almeyda, obispo de la Diócesis de Cartagena entre 1546 y 1563, quien impulsó y financió la construcción del colegio jesuita y la iglesia. San Esteban es también el nombre del primer mártir cristiano.
¿Qué cofradía procesiona desde la Iglesia de San Esteban?
La Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia, conocida popularmente como «Los Pavos», sale en procesión desde este templo cada Viernes Santo a las 18:15 horas. Su imagen titular, un crucificado del siglo XVI obra de Domingo Beltrán, se custodiaba originalmente en este templo jesuita.
¿Se celebran misas en la Iglesia de San Esteban?
No. La iglesia está desacralizada desde 1984, cuando se reconvirtió en sala de exposiciones al habilitarse el antiguo colegio jesuita como sede de la Presidencia de la Región de Murcia. No se celebran misas ni otros actos litúrgicos de forma regular.
¿Qué obras de arte destacan en el interior de la iglesia?
Destacan el retablo renacentista de la Capilla Mayor, ejecutado parcialmente en piedra, y el sepulcro del obispo Esteban de Almeyda, obra maestra de Bartolomé de Lugano en mármol de Carrara. También son de gran valor los retablos barrocos de las capillas laterales y las estatuillas de los Cuatro Padres de la Iglesia.
¿Cuál es la relación entre la Iglesia de San Esteban y Francisco Salzillo?
Francisco Salzillo, el genio de la escultura barroca murciana, estudió en el Colegio de San Esteban durante su juventud. La formación humanística y artística que recibió en esta institución jesuita influyó notablemente en su desarrollo como artista.
¿Por qué se expulsó a los jesuitas del Colegio de San Esteban?
En 1767, el rey Carlos III ordenó la expulsión de los jesuitas de todos los territorios de la Corona española. Tras su marcha, el edificio del colegio fue ocupado por una compañía de Dragones de la Reina y posteriormente, en 1777, se estableció la Casa de Misericordia y el Manicomio Provincial.
Enlaces de interés
- Región de Murcia Digital – Patrimonio Cultural
- Ayuntamiento de Murcia – Turismo y Cultura
- Comunidad Autónoma de la Región de Murcia
- Turismo Región de Murcia – Monumentos
- Cofradía del Santísimo Cristo de la Misericordia
Templos
Iglesia Arciprestal de Nuestra Señora del Carmen
Iglesia de Jesús
Iglesia de San Antolín Mártir
Iglesia de San Bartolomé – Santa María
Iglesia de San Esteban
Iglesia de San Francisco de Asís
Iglesia de San Juan Bautista
Iglesia de San Juan de Dios
Iglesia de San Lorenzo
Iglesia de San Nicolás de Bari
Iglesia de San Pedro Apóstol
Iglesia de Santa Catalina
Iglesia de Santa Eulalia
